La fibromialgia es una afección crónica que afecta aproximadamente al 2,4% de los españoles, lo que equivale alrededor de un millón de personas. La mayoría de los casos se presentan en mujeres, ya que esta enfermedad es entre siete y nueve veces más frecuente en la población femenina. Aunque se desconocen las causas exactas, existen ciertos alimentos que pueden ayudar los síntomas de esta condición persistente. Veamos cuáles son y cómo incluirlos en tu dieta.

La importancia de una buena dieta en los pacientes con fibromialgia
La fibromialgia provoca dolor generalizado, fatiga y una serie de síntomas que afectan significativamente la calidad de vida. Aunque su origen es complejo y no existe una cura definitiva, ciertos hábitos de vida, como una alimentación adecuada, pueden ayudar a controlar y aliviar el dolor. Una buena dieta no solo puede reducir la inflamación y mejorar los niveles de energía, sino también influir en el estado de ánimo y el bienestar general de quienes padecen esta enfermedad.
Explorar la relación entre la dieta y la fibromialgia, y cómo ciertos alimentos pueden desempeñar un papel clave en el manejo de esta condición, es un tema que estamos convencidos te puede interesar. Por eso, entender qué alimentación es más beneficiosa para la dieta diaria puede marcar una diferencia significativa en el tratamiento de esta enfermedad, ofreciendo una herramienta valiosa para complementar con otros tratamientos.
Alimentos antiinflamatorios: Claves para reducir los síntomas
¿Sabías que la inflamación en el cuerpo puede agravar el dolor y otros síntomas relacionados con la fibromialgia? Según diversos estudios e investigaciones en este ámbito, una dieta adecuada es fundamental para mejorar el bienestar. A continuación, te presentamos algunos alimentos antiinflamatorios que resultan beneficiosos para las personas con fibromialgia:
Pescados grasos
Los pescados grasos, como el salmón, la sardina y el atún, son excelentes fuentes de ácidos grasos omega-3. Estos compuestos poseen propiedades antiinflamatorias que pueden disminuir la inflamación en el organismo, aliviando así el dolor y la rigidez muscular. Incluir pescado en la alimentación varias veces a la semana contribuye a un mejor control de estos síntomas.
Frutas y verduras
Las frutas y verduras son ricas en antioxidantes y fitonutrientes que combaten el estrés oxidativo y la inflamación. En particular, las bayas, como los arándanos y las fresas, las cerezas y las verduras de hojas verdes, como las espinacas y col rizada, son unas opciones fantásticas. Dicho consumo te garantiza el aporte de nutrientes que favorecen a tu salud general.
Frutos secos y semillas
Los frutos secos, como las nueces y almendras, y las semillas, como la chía y linaza, son ricas en antioxidantes, grasas saludables y fibra. Estos alimentos contribuyen a reducir la inflamación y proporcionan energía. Además, las nueces son especialmente ricas en omega-3, lo que potencia aún más sus efectos antiinflamatorios.
Aceite de oliva virgen extra
Este “oro líquido” es una grasa saludable que contiene compuestos antiinflamatorios, como el oleocantal, que ha demostrado tener un efecto similar al de los medicamentos antiinflamatorios. Incorporar aceite de oliva en la cocina o como aderezo en ensaladas puede ser una forma deliciosa de añadir beneficios antiinflamatorios a la dieta.
Cúrcuma
Esta especia, comúnmente utilizada en la gastronomía india, contiene curcumina, un potente antiinflamatorio. Se puede añadir a los platos, tés o incluso tomar en forma de suplemento. Introducir cúrcuma en tu dieta puede ayudar a aliviar el dolor y la inflamación asociados con la fibromialgia.
Té verde
Esta variedad de té es conocida por sus propiedades antioxidantes y antiinflamatorias. Contiene polifenoles, que pueden ayudar a reducir la inflamación en el organismo. Si consumes té verde de forma regular puede ser beneficioso para la salud en general y el manejo de los síntomas de la fibromialgia.
Legumbres
Algunas legumbres, como los frijoles, lentejas y garbanzos, son ricas en fibra y proteínas, además de contener antioxidantes. Su consumo frecuente puede ayudar a mantener estables los niveles de azúcar en sangre y proporcionar un efecto antiinflamatorio que beneficia a quienes padecen fibromialgia.
¿Por qué las vitaminas y minerales esenciales son importantes en la fibromialgia?
Las vitaminas y minerales esenciales juegan un papel fundamental en el manejo de los síntomas de la fibromialgia, ya que pueden influir en varios procesos del cuerpo que afectan el dolor. Aquí te explicamos cuáles son las más apropiadas para estos pacientes.
- Magnesio. Es uno de los minerales más importantes para quienes padecen fibromialgia. El magnesio ayuda a relajar los músculos, mejorar la función nerviosa y reducir los espasmos y calambres. Además, se ha observado que estos pacientes suelen tener niveles bajos de este mineral, lo que puede empeorar el dolor muscular y la fatiga.
- Vitamina D. La deficiencia de vitamina D está relacionada con el dolor crónico y la fatiga, síntomas comunes en la fibromialgia. Su suplementación o la exposición moderada al sol pueden mejorar el dolor y la rigidez, puesto que es esencial para la salud ósea y muscular.
- Vitamina B12. Esta vitamina puede ayudar a mejorar los niveles de energía al promover la producción de glóbulos rojos. Además tiene un impacto muy positivo en la la salud del sistema nervioso. Un déficit de B12 puede agravar la fatiga y las dificultades cognitivas.
- Calcio. Al igual que el magnesio y la vitamina D, el calcio es esencial para la salud muscular y ósea. Su carencia genera debilidad y aumenta los dolores musculares, por lo que es importante asegurarse de incorporar la cantidad suficiente a través de la dieta o suplementos.
- Vitamina C. Este antioxidante es muy indicado para reducir la inflamación y el estrés oxidativo en el cuerpo. Dado que la fibromialgia puede estar relacionada con altos niveles de inflamación, la vitamina C, presente en las frutas cítricas y verduras, ofrece alivio.
- Zinc y selenio. Estos minerales también actúan como antioxidantes, protegiendo el cuerpo del daño celular y apoyando el sistema inmunológico. Un buen estado del sistema inmune mejora la respuesta del cuerpo al dolor y reduce los síntomas de la fibromialgia.

En conclusión, incorporar estos alimentos puede ayudar a aliviar los síntomas de la fibromialgia, y consecuentemente, reducir la inflamación y mejorar tu calidad de vida. Adoptar una alimentación rica en nutrientes y compuestos beneficiosos es una herramienta valiosa en el manejo de esta afección, junto con otros enfoques terapéuticos. Además de una buena dieta, la terapia EMDR es muy efectiva para tratar esta condición crónica, por lo que no dudes en ponerte en contacto con nosotros para más información. En Psicología Conde Orgaz somos especialistas en EMDR y fibromialgia.

